EL ÚLTIMO REDUCTO DE LA RESISTENCIA INCAICA TUVO ORIGEN WARI
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Los hallazgos del equipo de arqueólogos dirigido por Javier Fonseca Santacruz prometen reescribir la historia de un lugar emblemático en la conquista española y la resistencia inca en Cusco.
Los investigadores coinciden en que Espíritu Pampa es la mítica Vilcabamba la Vieja, emblema de la resistencia de Manco Inca y el lugar donde cayó Túpac Amaru I.
El propio Hiram Bingham la visitó poco antes de llegar a Machupicchu, a la que confundió con el reducto rebelde incaico. Sin embargo, los investigadores demostraron tiempo después que Espíritu Pampa fue el sitio usado por los incas rebeldes.
Desde entonces, el lugar fue identificado como de construcción incaico, pero el 23 de febrero del 2011 el arqueólogo cusqueño Javier Fonseca Santacruz descubrió una enigmática tumba de origen wari con un pectoral de plata en forma de «Y», una máscara del mismo metal con una figura antropomorfa, dos brazaletes de oro y dos báculos de madera de chonta, forrados con láminas de plata.
La noticia impactó pues demostraba que el asentamiento arqueológico de Espíritu Pampa tuvo un origen wari y luego fue utilizado por los incas.
La propuesta se afianzó con los recientes hallazgos. Fonseca asegura que las excavaciones «evidenciaron un templo mayor en forma de D, que presenta nichos en un número de seis, que se asemeja a la de la capital wari en Ayacucho. Es realmente muy importante por sus características constructivas, dentro de esta unidad arquitectónica se evidenció dos contextos: uno que corresponde a un camélido y otro a una ofrenda que está definido por dos botellas. Una con una representación antropomorfa de un estilo wari, con influencia nasca y la otra no tiene decoración, asociado a un pectoral de plata y a un tocado o corona de plata, lo que nos indicaría que este espacio del conjunto arqueológico de Espíritu Pampa jugó un papel muy importante durante la expansión wari en la selva».
Espíritu Pampa está ubicado en la vertiente oriental de la Cordillera de Vilcabamba, a casi 150 kilómetros de Cusco, rodeado de densa vegetación propia de la selva alta y similar a la de Machupicchu. Su acceso es por la vía Cusco-Quillabamba-Echarate y se proyecta como un nuevo destino sorprendente en medio de las selvas cusqueñas.
(Fuente: http://larepublica.pe/sociedad/1204172-espiritu-pampael-ultimo-bastion-inca-era-wari)